© Fernando Allen / WWF Paraguay
VIDA SILVESTRE
Compartimos nuestro planeta con millones de especies de plantas y animales, una maravillosa variedad de vida silvestre que enriquece nuestras vidas de muchas maneras.

Esta compleja red de vida proporciona los sistemas naturales de los que dependemos, dándonos elementos esenciales como agua, aire limpio, suelos fértiles y un clima estable. Nos otorga alimentos, medicinas y materiales y respalda millones de empleos. También inspira a personas de todo el mundo, enriqueciendo nuestras vidas de muchas maneras.

Pero la vida silvestre de nuestro planeta está en crisis: los números han disminuido en más de la mitad desde 1970 y las especies se están extinguiendo a un ritmo alarmante.

Necesitamos revertir esta pérdida de la naturaleza y crear un futuro en donde la vida silvestre y las personas prosperen nuevamente.

© Martin Harvey / WWF
Especies desaparecidas
La vida silvestre está desapareciendo en todos los continentes, en todos los océanos, en tierra y bajo el agua. Y su destino está en manos de una sola especie: el Homo sapiens

Las acciones humanas representan una amenaza para la vida silvestre principalmente de dos maneras: la destrucción y el daño a los lugares donde las especies viven y su uso insostenible.

Se siguen perdiendo grandes áreas de hábitat natural debido a la agricultura, la expansión urbana, la minería y la infraestructura. Además, los ecosistemas sufren los efectos de la contaminación, especies introducidas que a menudo superan a la vida silvestre nativa y, cada vez más, del cambio climático.

Mientras tanto, las poblaciones de muchas especies están disminuyendo debido a los niveles insostenibles de caza, pesca y cosecha. Otras están camino a la extinción a causa del comercio internacional de vida silvestre, o mueren en manos del ser humano cuando entran en conflicto directo con el hombre y su ganado.

Lo que hacemos

Queremos que la vida silvestre prospere. Trabajamos con muchos socios para lograrlo, buscando proteger las especies de plantas y animales al enfrentar las amenazas desde sus raíces.

Desde los polos hasta los trópicos, estamos trabajando para preservar los hábitats vitales. Para 2030, queremos ver el 30% de la superficie del mundo administrada de una manera que tome en cuenta la vida silvestre a través de áreas naturales protegidas como parques nacionales o áreas de conservación administradas por la comunidad. Estamos trabajando con agencias gubernamentales y personas locales para aumentar la cobertura de las áreas protegidas, fortalecer la forma en que éstas se manejan y mejorar las conexiones para que la vida silvestre se pueda mover libremente entre ellas. Al mismo tiempo, estamos abordando el comercio ilegal y la sobreexplotación mediante el fortalecimiento de las regulaciones, asegurándonos de que se apliquen adecuadamente. También estamos influyendo en los mercados y las decisiones de los consumidores que fomentan la demanda de productos de vida silvestre.

© naturepl.com / Franco Banfi / WWF
Cambio de dirección

Los esfuerzos de WWF y otros grupos han ayudado lograr algunos grandes éxitos para la vida silvestre.

La cantidad de tigres está al alza por primera vez en más de un siglo, la población de delfines del Irrawaddy también aumentó tras varias décadas de disminución, y cada vez más países de Asia están prohibiendo la venta de marfil de elefante.

La gente también se ha beneficiado de estos esfuerzos. La protección de los bosques y otros hábitats cruciales ayuda a conservar los recursos naturales vivos de los que dependen muchas comunidades. El turismo ecológico gestionado con sensibilidad genera ingresos necesarios para muchos países en desarrollo.

Estas son señales positivas y ayudan a marcar el camino hacia un mejor futuro para las personas y la naturaleza. Pero tenemos que hacer mucho más para detener y revertir la pérdida de la vida silvestre del mundo. Finalmente, nuestro propio bienestar y sobrevivencia dependen de ello.